domingo, 21 de marzo de 2010

El impacto de la violencia doméstica en los niños

La ventaja de tener un círculo amplio de amigos es que de esta forma estamos expuestos a una variedad de experiencias, y así que me encontré a mí misma viendo una poco conocida película extranjera que trataba el tema de la rivalidad entre dos niños de escuela, con las historias de sus familias entretejidas en el guión. Lo menos que puedo decir es que fue reconfortante, porque es una película sin tonterías, sin adornos, que trata dos temas que son esenciales a la felicidad de todo niño y toda familia – para obtener lo mejor de los niños debe haber una sana competencia entre los niños, y la relación entre ambos padres y el ambiente del hogar juegan un rol importante al determinar cómo los niños se comportan en otros aspectos de sus vidas.

La violencia doméstica se ha convertida en una parte tan común de muchos hogares norteamericanos que no parece algo lo suficientemente significativo como para ser discutido cuando se habla del bienestar de los niños. Los padres pelean entre sí provocando abusos sin darse cuenta del efecto detrimental que esto puede tener en la salud mental de sus hijos. Cuando los niños son constantemente expuestos a los sonidos e imagines de sus padres peleando, tienden a:

•Portarse mal: Algunos niños se vuelven más agresivos cuando ven a sus padres peleando o discutiendo, y se portan mal en la escuela y en otros lugares también. Es su manera de llamar la atención y de clamar por ayuda, pero son frecuentemente malentendidos y castigados.

•Encerrarse en sí mismos: Otros se encierran en sí mismos de modo que nadie puede acercárseles; se vuelven reclusos y eliminan todo contacto social. Algunos incluso toman drogas y alcohol como un medio de aliviar la miseria que sienten debido al estado en que está el matrimonio de sus padres.


•Mala ejecución escolar: Aún los niños más brillantes empiezan a tener una pobre ejecución en la escuela cuando sus padres pelean y la atmósfera en sus hogares no está en paz. Se afectan mentalmente o no son capaces de concentrarse en sus asignaciones o en estudiar debido al ruido y la confusión resultantes de las peleas.

•Pérdida de confianza: La mayoría de los niños de hogares rotos o abusivos pierden la confianza en sí mismos y generalmente se dan por vencidos fácilmente en sus estudios y en otras áreas como en los deportes. Crecen para convertirse en gente agresiva o bravucona – en fin, no son normales.

Los padres deben comprender que deben hacer lo que sea necesario por el bien de sus hijos en lugar de pensar en ellos mismos. Si hay un pleito constante en el hogar, pueden buscar consejería o buscar la ayuda de sus parientes y amigos para decidir cómo seguir adelante de manera que los niños no sigan afectándose más de lo que ya lo han sido.

Apostilla: Este artículo es una contribución de Brooklyn White, quien suele escribir sobre el tópico de los programas técnicos de ciencias forenses. Se le puede escribir al brookwhite26@gmail.com.

NOTA POR VIDAL GUZMÁN:
Quiero agradecerle a Brooklyn White por su contribución a mi blog. Su artículo es un breve pero complete resumen de los efectos que la violencia domestica tiene en nuestros niños. Si algún otro de mis lectores quiere contribuir con un artículo a este blog, siéntanse en la libertad de hacerlo. Envíenme el artículo, lo revisaré, y si creo que tiene cabida en nuestro concepto, seguramente lo publicaré.

Hay varias razones para publicar este artículo en mi blog. Primero, el movimiento en pro de los derechos de los padres de ninguna manera niega el problema social que la violencia doméstica representa. Segundo, la violencia doméstica es un problema que afecta ambos géneros, no solamente a las mujeres. Finalmente, la manera en que el estado maneja la violencia doméstica es uno de los mayores escollos que nuestro movimiento ha encontrado.

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